EL CORTOMETRAJE ´EL CÍRCULO´, RODADO EN LENGUA DE SIGNOS, SE ESTRENA EN EL ESPACIO DE LAS ARTES TEA

EL CORTOMETRAJE ´EL CÍRCULO´, RODADO EN LENGUA DE SIGNOS, SE ESTRENA EN EL ESPACIO DE LAS ARTES TEA

Nosotros formamos parte de un círculo, siempre intentamos integrarnos en un ambiente determinado, de amigos, de familia... "Los sordos saben que viven en un círculo y comunicarse con otros es muy complicado", cuenta Eugenia Arteaga, la escritora y directora del cortometraje El círculo, rodado en lengua de signos.
Esta realizadora canaria �perteneciente al colectivo Digital 104� trabajó durante meses con actores no profesionales para dar forma a esta historia protagonizada por Carlos Valencia y Lorena Plasencia que pretende dar visibilidad a las barreras que deben enfrentar diariamente tanto las personas sordas como las oyentes. TEA acoge mañana el estreno de este trabajo, producido por la Fundación Canaria para las Personas con Sordera (Funcasor).
La cinta se pasará en doble sesión, a las 20:00 horas y a las 21:00 horas, de manera gratuita, previa retirada de las invitaciones en la taquilla del museo.
El cortometraje presenta a una pareja de un chico sordo que trabaja como monitor en Funcasor y una chica oyente que trabaja como intérprete de lengua de signos. Ella es hija de padres sordos, por lo que ha madurado muy rápidamente y está bloqueada psicológicamente. Eugenia Arteaga ha llevado esta historia de temática del sordo a su terreno, a su forma de contar y hacer cine. El círculo "es una historia intimista que nos hace conscientes de que las limitaciones no son de los discapacitados, como la sordera o la ceguera, también hay limitaciones emocionales, sobre todo a la hora de entender y sentir a los demás", comenta la realizadora.
Este corto, contado en lengua de signos, está protagonizado por actores no profesionales. Tras realizar un casting en Funcasor del que salieron los personajes de esta historia, la directora tuvo que trabajar mucho para "que el espectador viera a personajes reales", por lo que cogió aspectos de cada persona porque "tienen que ser ellos", remarcó Arteaga. La realizadora, que estudió el lengua de signos para sumergirse por completo en esta historia que habla de las barreras de comunicación, reconoce que "el rodaje ha sido una de las experiencias más increíbles que le han regalado, ya que ha aprendido el valor de cada palabra".

Fuente: La Opinión de Tenerife