SOBRE EL BOSÓN DE HIGGS EN LENGUAJE DE SEÑAS

Se dice que es un hito científico equivalente al descubrimiento del ADN, que es el hallazgo más relevante en los últimos 50 años en el campo de la física y que marcará una nueva era en este campo del conocimiento. Lo cierto es que la confirmación de la existencia de una partícula con las mismas características al llamado Bosón de Higgs, abre una ventana importante para comprender al Universo. En concreto, el Bosón de Higgs, es la última pieza del Modelo Estándar de Física de Partículas que faltaba por descubrir. Modelo que, básicamente, es una construcción de reglas matemáticas que describe cómo todas las partículas conocidas en el Universo interactúan entre sí. Esta partícula, descubierta gracias al esfuerzo de cerca de tres mil científicos que trabajan en el Centro Europeo de Física de Partículas (Cern), más otros miles alrededor del mundo, debe su nombre al científico británico, Peter Higgs, quien el año 1964 teorizó sobre el proceso que les da masa a las partículas elementales, llamado hoy el “mecanismo de Higgs”. El académico de la Facultad de Física de la Universidad Católica, Marco Aurelio Díaz, explicó que “el mecanismo de Higss es el que le da masa a todas las partículas y fue propuesto casi 50 años atrás por un grupo de físico y desde entonces distintos experimentos han tratado de encontrar este Bosón de Higgs y eso es lo que ha ocurrido ahora”. “Es un resultado que va a ir a los libros de textos, es sumamente importante, entendemos cómo funciona el universo las partículas que lo forman en su aspecto de por qué adquieren masa”, agregó el experto. Uno de los principales aportes que tiene este hallazgo en el mundo científico, es la posibilidad de ahondar más en el estudio de la llamada “materia oscura”. Para Marco Aurelio Díaz, esta afirmación es efectiva, pero se requiere mucho trabajo para llegar a eso: “Hay mucho que aprender del universo, el descubrimiento puede tener relación con eso, pero en realidad apunta a una dirección levemente distinta, al comportamiento de las partículas elementales y a cómo éstas adquieren masa, todo este entendimiento es muy posible que tenga su efecto en entender la materia oscura y la energía oscura, pero más trabajo es necesario en esa dirección”, dijo. Para el académico del departamento de física de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, Nelson Zamorano, este descubrimiento no tiene ninguna aplicación práctica, pero “el beneficio directo para la humanidad es el acelerador de partículas, el instrumento que se utilizó para detectar esta partícula, eso es, yo no diría la tecnología más avanzada, sino totalmente nueva, de la cual en el futuro se podrán sacar muchas aplicaciones”, afirmó. Dentro de los usos que se podrían dar a partir de la tecnología utilizada en el Colisionador de Hadrones está la optimización de las técnicas en radioterapia para el tratamiento de cáncer, mejorar la resistencia de los satélites a las “manchas solares” y el perfeccionamiento del “trabajo en red” a nivel computacional. Ahora los esfuerzos de los científicos estarán abocados en tratar de encontrar la ecuación que, como lo pensó Albert Einstein, unifique toda la física en una sola teoría.