martes, 7 de junio de 2011
EL DESARROLLO SOCIO-AFECTIVO DEL ADOLESCENTE SORDO
EL DESARROLLO SOCIO-AFECTIVO DEL ADOLESCENTE
SORDO
Como premisa inicial tenemos que los niños con una discapacidad auditiva
pueden ser niños dependientes de los adultos, inseguros y egocéntricos.
pueden tener un autoconcepto negativo y falta de identidad personal.
La mayoría de personas sordas nacen en familias de oyentes y, en concreto en
nuestro país, son escolarizadas en centros de integración y construyen por
tanto su autoconcepto e identidad a partir de su relación con personas oyentes.
LA FORMACIÓN DE LA PERSONALIDAD Y LOS PROCESOS
COMUNICATIVOS
En el proceso de formación de la personalidad hay algunas características que
parecen vinculadas de una forma más directa a los procesos comunicativos
que se producen con el entorno. Entre estas tenemos:
DEPENDENCIA E INDEPENDENCIA
El progreso en la autonomía personal puede encontrarse dificultado en el
chico o la chica con sordera por actitudes sobre-protectoras por parte de las
personas adultas de su entorno tanto en el medio familiar como en el centro
escolar.
IMPULSIVIDAD Y REFLEXIVIDAD
Estos dos rasgos opuestos de la personalidad se definen según la tendencia
a planificar la actividad ya anticipar los resultados (reflexividad) y la tendencia
a actuar de forma inmediata (impulsividad). En consecuencia, el chico y la
chica con sordera que presentan un déficit lingüístico importante pueden
mostrarse con una mayor tendencia a la impulsividad debido justamente a
este déficit. Sin embargo, también las condiciones educativas tienen una
función importante en este sentido. Así, respuestas que reflejan poca
resistencia a la frustración pueden explicarse porque a menudo se
proporcionan pocos datos a la persona sorda para anticipar la situación. La
tendencia a la reflexividad puede educarse en el adolescente sordo llenando
los vacíos informativos que tiene respecto a los antecedentes de
determinados acontecimientos sociales o personales, intencionalidad de los
demás, etc.
EGOCENTRISMO Y COOPERACIÓN
La comprensión del punto de vista de los demás y la capacidad de ponerse en
otra perspectiva que la propia es una de las características de madurez social.
En un primer momento el niño tiene una visión egocéntrica y progresivamente
va aprendiendo a situarse en otras perspectivas que no son la suya. En este
proceso es importante la actitud de los adultos facilitando explicaciones sobre
los propios estados emocionales, expectativas etc., y tiene especial
importancia la socialización con los pares de edad.
Esta socialización tiene funciones algo diversas según se trate de oyentes o
sordos. Con los primeros el chico y la chica con sordera aprenden a
comprender su perspectiva y a realizar adaptaciones comunicativas. La
relación entre sordos (en el caso de utilizar lengua de signos) es más fluida
desde el punto de vista comunicativo y permite compartir los mismos
problemas y encontrar conjuntamente soluciones a los mismos.
EL AUTOCONCEPTO EN LA PERSONA SORDA: IDENTIDAD SORDA,
IDENTIDAD OYENTE E IDENTIDAD DUAL
Una característica importante de la personalidad es el autoconcepto; es decir,
la percepción que la persona tiene de sí misma tanto a nivel personal, social
como académico. Durante el proceso de construcción del concepto de uno
mismo, las experiencias y las relaciones con el medio, así como la interacción
con las personas próximas juegan un papel destacado.
Todo adolescente necesita encontrarse con iguales, generando nuevos
procesos de identificación basados en las identificaciones sociales que van
sustituyendo las identificaciones parentales. El joven busca iguales, ya sea
para pasar lo más desapercibido posible o bien para sobresalir por ciertas
actitudes o condiciones frente al grupo.
Por otro lado, en este momento de la vida, todo aquello que es vivido como
falta “se sobredimensiona” y en la adolescencia es justamente la palabra y la
escucha una de las armas más importantes de los jóvenes (hablan por
teléfono todo lo que pueden, se entusiasman con las letras de las canciones,
hablan una jerga que hasta los adultos pocas veces lo entienden, …).
Todos estos pequeños y grandes detalles cobran un valor incalculable en el
sentir del adolescente sordo. Ellos reconocen que no tienen ni pueden hacer
uso en forma espontánea de algo tan fundamental como es el simple arte de
escuchar, siendo esto algo más apreciado que el hablar.
El adolescente sordo es primero adolescente y después sordo, por lo tanto
está inmerso en un medio cultural y social que lo rodea y desea como cualquier
otro identificarse con lo que le parece valorado o lo que está de moda,
pudiendo dar lugar a situaciones en las que evite todo lo que signifique ser
diferente (uso de audífonos), o bien haga uso de cosas de las que en principio
no obtiene beneficio (por ejemplo: walkman).
A nivel académico, los altos niveles de exigencia al que generalmente están
sometidos los alumnos sordos, pueden provocar que se centren
excesivamente en las tareas académicas y una reducción de las actividades
sociales, sin olvidar que esto puede provocar en ellos un sentimiento
"estresante" debido a las dificultades en alcanzar un nivel adecuado.
La mejor estrategia para conseguir un autoconcepto positivo es adoptar una
identidad dual que permita a la persona sorda desarrollar sus potencialidades
tanto en la comunidad sorda como oyente.
RESPUESTA EDUCATIVA PARA FAVORECER LA MADURACIÓN
PERSONAL Y SOCIAL DEL ALUMNO SORDO
En el medio escolar se pueden plantear actividades que permitan el desarrollo
de adaptaciones mutuas entre sordos y oyentes en la convivencia cotidiana.
Entre ellas estarían:
POTENCIAR LA AUTONOMÍA PERSONAL
Argumentar las sanciones por reciprocidad.
Transmitir confianza en las capacidades y decisiones del alumnado.
Fomentar el hábito de argumentar las propias acciones.
POTENCIAR LA REFLEXIVIDAD
Fomentar la planificación de las actividades.
Facilitar la anticipación de acontecimientos.
FACILITAR LA COMPRENSIÓN DE LA SORDERA POR PARTE DE LOS
PARES OYENTES
Proponer situaciones experienciales de comprensión del fenómeno de la
atención dividida en el tiempo y de la lectura labial (Actividades en las que
el alumnado oyente deba comprender un mensaje sin sonido, por ejemplo).
Conocimiento de los códigos gestuales, palabra complementada o lenguaje
de signos en el caso de que el alumnado sordo los utilice.
EJERCITAR LAS ADAPTACIONES COMUNICATIVAS ENTRE SORDOS
y OYENTES
Juegos de comunicación y de cooperación.
Experiencias de compañeros tutores y de tomadores de apuntes.
FACILITAR LA CONVIVENCIA CON COMPAÑEROS SORDOS
Propiciar grupos de encuentro entre el alumnado sordo escolarizado en
diferentes centros de integración.
1 comentarios:
Buenas noches, estoy haciendo mi trabajo de grado para para optar al titulo de Orientación educativa,es una investigación de corte cuaitativo cuyo objetivo general es lograr la integración socioafectiva de dos estudiantes que presentan discapacidad auditiva con sus pres oyentes, me gustaría saber si pudiese recomendarme trabajos de grado que se orienten hacia este tema en particular. de ante mano, mil Gracias por su atención
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